17 de marzo de 2013

Miguel Ángel Buonarroti y sus obras arquitectónicas


Miguel Ángel Buonarroti fue un arquitecto, pintor y escultor italiano renacentista considerado uno de los artistas más importantes de la historia. Las obras que se engloban en el arte renacentista, son obras que han conseguido dejar una gran huella en el mundo artístico. Fue un estilo en el que se produjeron grandes cambios en la percepción del arte y en la manera de manifestarlo.
Centrándonos en Miguel Ángel, fue un autor inteligente e ingenioso que logró crear obras relevantes en los tres ámbitos, es decir, en el ámbito de la arquitectura, escultura y pintura.
En arquitectura presenta obras como la Escalera de la Biblioteca Laurenciana, Sacristía de San Lorenzo y la Ordenación de La Plaza del Capitolio en Roma. 
En la Escalera de la Biblioteca Laurenciana, consigue en un escaso espacio, dar la impresión de gigantesca majestad. Miguel Ángel con esta obra demuestra que es un maestro en el manejo de las masas, los espacios y la luz. Es muy original la alternancia de escalones de dinámicas curvas con otros de estáticas rectas, llenándola de ritmo y movimiento. Miguel Ángel fue revolucionario al transformar las normas clásicas: tímpanos rotos, pilastras invertidas y delgadas en  la parte inferior, columnas introducidas en el paramento del muro y de ningún orden concreto.
La Sacristía de San Lorenzo presenta una sala como aposento funerario, en ella realiza las tumbas de Giuliano y Lorenzo de Médicis, sus mecenas en Florencia. Las tumbas aparecen embutidas en el muro, integrándose perfectamente arquitectura y escultura. Presenta una tumba de media altura con volutas y sobre ellas, figuras alegóricas del día y la noche.
La Odenación de la Plaza del Capitolio en Roma, sigue el ejemplo de la Plaza de Pienza de Rosellino, el conjunto urbanístico más acabado del Quattrocento. Plaza rodeada por edificios solemnes, adintelados y decorados con pilastras, de planta trapezoidal, con el fin de dar un mayor énfasis a la perspectiva. En el centro colocó la estatua ecuestre de Marco Aurelio sobre un pedestal, y en torno a ella dispuso el Palacio de los Conservasores y el Museo Capitolino, así como también el Palacio del Senado, dando al conjunto una nueva construcción de acuerdo con la monumentalidad propia de la Antigua Roma.




Marta Vicente Carmona 1º Periodismo (mañana)


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